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Recetas paso a paso

Alcachofas fritas con miel

¡Descubre el encanto rústico de las alcachofas fritas con miel! Esta combinación de sabores te cautivará desde el primer bocado. Imagina la textura perfectamente crujiente de las alcachofas bañadas en un dulce velo de miel, una sinfonía de sensaciones en tu paladar.

¿Pensabas que la cocina gourmet era complicada? ¡Nada más lejos de la realidad! Con esta receta, incluso los novatos se sentirán como chefs estrella. Y si lo tuyo es la fusión de sabores, no puedes dejar de probar el arroz con bogavante, ideal para impresionar en cualquier ocasión.

¿Te atreves con el desafío? Dale un giro a tu menú y añade este plato estrella. Y para los amantes del dulce, nada como coronar la comida con una tarta mousse de chocolate, pura tentación. Además, te invito a descubrir el encanto de la crema de alcachofas, otra maravilla que realza la versatilidad de este noble vegetal.

Por qué te encantará esta receta

  • Explosión de sabores - La combinación de alcachofas crujientes con el dulzor de la miel te transportará a un nuevo universo de sensaciones gustativas.
  • Textura perfecta - Olvídate de las verduras aburridas; estas alcachofas tienen el equilibrio ideal entre una cobertura dorada y un corazón tierno.
  • Encanto rústico - Esta receta tiene ese toque hogareño y tradicional que te hará sentir como si estuvieras en la cocina de la abuela, pero con un giro gourmet.

Tus ingredientes imprescindibles

Para que tus alcachofas fritas con miel sean la envidia de cualquier paladar, necesitarás ingredientes frescos y de la mejor calidad. Aquí tienes lo que no puede faltar en tu cocina:

ingredientes alcachofas fritas con miel
  • Alcachofas - Busca aquellas que al cogerlas te sorprendan por su peso y cuyas hojas estén bien cerradas, como guardando un tesoro en su interior. Eso es señal de que están fresquísimas y listas para cocinar.
  • Harina - Vale cualquier harina que tengas por casa, aunque si te decantas por la de repostería, tus alcachofas quedarán con un rebozado de lo más chic.
  • Huevos - Si son de corral, mejor que mejor. No solo estarás contribuyendo al bienestar animal, sino que tu rebozado lucirá un dorado de anuncio.
  • Aceite de oliva - No escatimes en este ingrediente. Un buen virgen extra es el secreto para unas alcachofas fritas aromáticas y con un punto crujiente insuperable.
  • Miel - La guinda del pastel. Una miel que sea pura y aromática hará que tus alcachofas pasen de ser un simple plato a una experiencia gastronómica sublime.

¡Empecemos por lo más importante, limpiar nuestras alcachofas! Quítales las hojas exteriores con cuidado hasta que veas las más tiernas y blancas. Luego, corta la parte superior y el tallo, dejando aproximadamente 2 cm. Para terminar, recorta las puntas de las hojas restantes para evitar que se ennegrezcan durante el marinado.

Recuerdo cuando mi abuela me enseñó a preparar alcachofas; siempre decía que la clave estaba en el marinado en zumo de limón. Así que, una vez limpias, sumergiremos las alcachofas en zumo de limón para evitar que se oxiden y se pongan negras.

Dejaremos marinar durante 15 minutos antes de secarlas bien y continuar con el rebozado. ¡El zumo de limón no solo previene la oxidación, sino que también le da un toque de sabor delicioso a nuestras alcachofas!

¡Ahora viene la parte divertida! Una vez tengamos nuestras alcachofas limpias y marinadas, es hora de darles ese delicioso rebozado que las hará crujientes y doradas.

En un bol, mezclamos harina, una pizca de sal y pimienta al gusto. En otro bol, batimos los huevos como si estuviéramos preparando una tortilla (¡quizás te apetezca hacer una más tarde!).

elaboracion alcachofas fritas con miel

Coge cada alcachofa y pásala primero por la mezcla de harina, sacudiéndola suavemente para eliminar el exceso. Luego, sumérgela en el huevo batido y vuelve a pasarla por la harina. Repite el proceso para asegurarte de que queden bien cubiertas y con una capa uniforme.

Calentamos aceite de oliva en una sartén a fuego medio-alto. Cuando el aceite esté listo (puedes probarlo echando un poco de harina; si burbujea, está listo), añadimos las alcachofas rebozadas y las freímos hasta que estén doradas y crujientes. ¡Ojo! No las dejes demasiado tiempo, o se quemarán por fuera y quedarán crudas por dentro.

Retiramos las alcachofas de la sartén y las colocamos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. ¡Y listo! Ya tenemos nuestras alcachofas fritas perfectamente rebozadas y listas para disfrutar.

¡Presentación y salsa de miel que harán brillar tus alcachofas fritas!

¡Es hora de disfrutar de tus deliciosas alcachofas fritas! Pero antes, sigue estos sencillos pasos para presentarlas de la mejor manera y darles un toque dulce y delicioso.

  • Escurrimos las alcachofas fritas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. ¡No queremos que nuestras alcachofas queden empapadas en aceite, sino crujientes y sabrosas!
  • Servimos las alcachofas fritas en un plato bonito y acompañamos con la salsa de miel . Si quieres darle un toque extra, puedes añadir unas hojas de menta fresca o un poco de pimienta negra recién molida. ¡Verás cómo la presentación hace que este plato sea aún más irresistible!

Receta

Alcachofas fritas con miel

Tiempo de preparación: 30 minutos

Una deliciosa combinación de sabores para disfrutar en cualquier ocasión.

Ingredientes

  • 8 alcachofas
  • 200 g de harina
  • 2 huevos
  • 500 ml de aceite de oliva
  • 100 ml de miel
  • Zumo de limón al gusto
  • Sal al gusto

Instrucciones paso a paso

  • Limpia las alcachofas retirando las hojas exteriores y corta el tallo dejando aproximadamente 2 cm. Corta la parte superior de las alcachofas y pásalas por zumo de limón para evitar que se ennegrezcan.
  • Marina las alcachofas en zumo de limón durante 15 minutos.
  • Prepara la mezcla de harina y huevos batidos en un plato hondo.
  • Pasa las alcachofas por la mezcla de harina y huevo, asegurándote de que queden bien cubiertas.
  • Calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio-alto.
  • Fríe las alcachofas rebozadas hasta que estén doradas y crujientes. Retíralas de la sartén y escúrrelas sobre papel absorbente.
  • Coloca las alcachofas fritas en un plato y báñalas con miel caliente.

Notas:

  • Si lo prefieres, puedes sustituir la miel por una salsa de yogur o una vinagreta.
  • Sirve las alcachofas fritas con miel acompañadas de una ensalada verde para equilibrar los sabores.
  • Guárdalas en un recipiente hermético en el frigorífico hasta 2 días.